El
Salario Mínimo
Por
Armando Rodriguez
Este
gobierno sí que se preocupa por su pueblo… se da cuenta de que con un salario de
sólo $X se está en la miseria e irguiéndose como defensor de
pobres, el presidente saca su
pluma… desde hoy todos esos crueles empleadores quedan obligados a pagar un
mínimo de $(X +A). Beneficiados y
altruistas hacen loas de apoyo a este gobierno que tan generosamente ha aliviado
la situación de tantas personas humildes.
La dura realidad es que, en el mejor de
los casos, se trata sólo de un alivio transitorio; a ese aumento arbitrario, el
mercado responde con un efecto llamado inflación, el dinero pierde valor y a la
vuelta de un par de años el poder adquisitivo de su salario regresa a su valor
original o, más probablemente a uno inferior, como muestra claramente el gráfico
a continuación (http://en.wikipedia.org/wiki/File:History_of_US_federal_minimum_wage_increases.svg
).
El
mercado es un sistema en equilibrio,
cuando se le perturba, tiende a regresar a un nuevo equilibrio que no es
igual el anterior, ya que el sistema presenta cierta histéresis o sea que cada
perturbación deja como una “cicatriz” en la economía.
El
mecanismo no es difícil de intuir, Al empleador le aumentan de repente los
costos de la mano de obra y tiene que ir a un reajuste de su negocio,
he aquí lo que puede hacer:
·
Aumentar el precio de sus
productos o servicios;
·
Recortes de la calidad
·
Eliminar puestos de trabajo,
para lo que en inglés existe el término “downsize”
A veces
ninguna combinación de las anteriores medidas es suficiente y la empresa se va
panza arriba. Como quiera, esto provoca otro de los efectos del salario mínimo,
el aumento del desempleo. Si superponemos el gráfico de arriba con el de la
historia del desempleo, se puede ver que, definitivamente, una cosa tiene que
ver con la otra.
Hay
datos estadísticos tan elocuentes que apenas requieren comentarios adicionales.
Uno de éstos es el que muestra el salario mínimo y con el porciento de desempleo
en Europa Occidental. Los países
sin salarios mínimos presentan, en promedio, menos de la mitad del desempleo de
los que lo tienen.
Hay
otros efectos… El valor de la mano de obra se ajusta por oferta y demanda y
mientras mayor sea la oferta de ésta, menor será su valor.
Cuando la fuerza laboral de un país se educa, disminuye la oferta de mano
de obra de baja calificación, lo que de forma natural aumenta los salarios de
menos calificación. En EU, este efecto se ve atenuado por la inmigración, mucha
de ella ilegal, que vuelve a aumentar la oferta manteniendo bajos los salarios
del área de baja calificación. Cuando arbitrariamente, el gobierno establece un
salario mínimo, estimula esta inmigración poco productiva que, de forma
indirecta, es subvencionada por resto de la sociedad.
La
pregunta que se cae de la mata es, si se sabe que esto funciona así ¿por qué
entonces se persiste en eso de imponer un salario mínimo? Pues, pura demagogia y
oportunismo electoral. Con sus
acostumbrados disfraces de altruistas, los de la izquierda abogan por el aumento
del salario mínimo irguiéndose como defensores de los sectores más pobres. ¿Es
que estos señores desconocen la información contenida en estos gráficos y
tablas? No, claro que ellos no, lo
que sí cuentan con que los supuestos beneficiarios no la conozcan y les concedan
su apoyo y su voto. Estos señores
son los mismos que apoyan la amnistía de los inmigrantes ilegales, para así
poder contar con el futuro voto de esa masa de inmigrantes que vino a disfrutar
de la bonanza del salario mínimo.
Pero no es lo único que se sabe de sobra que no funciona y la izquierda persiste en mantener e impulsar:
·
El control de las armas para
evitar las masacres perpetradas por dementes.
·
La empresa privada es más
eficiente que el gobierno, pero se insiste en que éste asuma más y más
funciones; siendo el Obamacare la más reciente de esas manifestaciones en EU.
·
Las perforaciones petroleras
de tierra y los oleoductos son menos riesgosos para el medio ambiente que las
perforaciones de aguas profundas… ¿Alguien se acuerda de la plataforma Horizon
de la British Petroleum en Golfo de México?
·
¿Y qué de las tierras que se
dejan de explotar para proteger especies en supuesta extinción?… El daño
ecológico de esas extinciones es polémico, para usar el más suave de los
epítetos… pero si no protege a la madre tierra, al menos logra el voto de los
ambientalistas.
·
¿Y qué de la
acción afirmativa? O el racismo a la inversa, para ser más exactos. Esto se
parece en algo al salario mínimo: tú has
aprendido como para una C, pero por ser negro te voy a dar una A;
eso es como decir, te voy a
pagar $10 pero su valor adquisitivo terminará siendo$ 7.
Y así,
punto por punto, la agenda de la izquierda es como un tumor canceroso que se va
comiendo a los países donde se enraíza, llegando en algunos lugares a ser tan
grande que hasta se ve desde el espacio.